“¿Qué tal va todo?” pregunta un amigo a otro.
“Hoy muy bien la verdad, pero no te preocupes que ya
aparecerá alguien para fastidiarlo” responde el otro amigo.
Pues esa misma impresión tengo cuando la economía,
con reformas y sacrificio, comienza a levantar cabeza y el nacionalismo amenaza
con desacatar leyes y Constitución –votada favorablemente por el 90% de los
catalanes- y elevar fronteras donde nunca las hubo.
En la misma semana en que el banco industrial
americano, Morgan Stanley, para el que trabajan 57.000 técnicos, titulaba con
un "¡Viva España!" su informe con recomendaciones de invertir en
España antes que en Italia o Alemania, se producían los anuncios europeos de
que cualquier territorio escindido queda fuera de la Unión.
Por ello no puede extrañar que los promotores del
complejo de ocio Barcelona World en Tarragona se replanteen el proyecto si
Cataluña sale de la UE dado que se perdería la libre circulación de turistas
europeos y la moneda común.
O que cierre su planta en Barcelona Cerámicas del
Foix, del Grupo Roca, con 114 despidos para concentrar su producción en la Vall
d'Uixó.
Es evidente que estamos en el camino de la
recuperación con la bolsa en máximos de 2 años, la prima de riesgo marcando
mínimos, las empresas del IBEX aumentan beneficios en un 25,3%, superávit
exterior, contención del déficit público, regreso del capital extranjero y
aumento de productividad.
Sin embargo buena parte de esos resultados se ven
empañados por el deseo secesionista del nacionalismo catalán, dado que
cualquier proceso de división y nuevas fronteras conlleva empobrecimiento.
Las mayores perdidas en caso de ruptura son
obviamente para la parte pequeña -Cataluña comprende el 16% de la población y
el 6% del territorio de España- que en este caso se adicionaría el coste de la
perdida de moneda y la salida de la Unión.
El calculo global sobre lo recibido y aportado por
cada Comunidad al Estado depende del autor, pero es inequívoco en términos de
Seguridad Social donde la diferencia en el último año es de 2.789 millones de
euros favorable a Cataluña.
Por todo ello quiero hacer mío el reciente acuerdo
de la Diputacion Provincial de Castellón: "Compartim amb Tarragona geografia,
conques hídriques, activitats econòmiques, cultura, tradicions taurines,
diòcesi episcopal i milers de llaços familiars que no coneixen cap frontera”
“Ens sentim
tan orgullosos del nostre vincle amb Tarragona com de la nostra valenciania i
espanyolitat i desitjem enfortir tots els vincles històrics amb Tarragona i la
resta de Catalunya”
Miguel Barrachina Ros
Economista y Vicepresidente de la Diputación de
Castellón
La culpa del aumento del nacionalismo en cataluña lo tenéis los peperos, con vuestra visión uniforme de España.
ResponderEliminar¿Realmente pensáis que Cataluña puede ser igual que La Rioja o que Murcia?
Me da tristeza decirlo, pero os estáis cargando España.
Pero como puedes decir eso anonimo, si hoy los socialistas han pactado con todos los que quieren romper a España. Igual piensas como Arzallus que los vascos son una raza superior, en este caso los catalanes pues eso me recuerda a alguien de Alemania. Tu veras.
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