viernes, 24 de julio de 2015

La intensa promoción turística de la Diputación ayuda a aumentar en un 7,7% los viajeros en los hoteles de la provincia hasta junio

  • La institución contribuye a la tendencia de desestacionalización turística que arrojan los datos de junio publicados por el INE.
  • Martínez: “Lo que más nos importa es que esta mejora supone de enero a junio haya subido un 5,7% el empleo en el sector”.

La intensa promoción turística que hace la Diputación de Castellón de acuerdo a las necesidades de los municipios y del sector empresarial de la provincia está ayudando a que la actividad turística siga mejorando y adquiriendo la tendencia a desestacionalizarse.

Así lo confirman los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística en torno al comportamiento de los alojamientos hoteleros de la provincia, que han tenido en el primer semestre de 2015 un 7,7% más de viajeros y un 3,9% más de pernoctaciones respecto al mismo periodo de 2014.

El vicepresidente provincial de Turismo, Andrés Martínez, ha explicado que “la mejora en la cifra acumulada de viajeros y de pernoctaciones se traduce en más actividad turística durante más tiempo, y eso ya se nota en datos de empleo. Eso es lo que más nos interesa, que la gente de nuestros pueblos tenga trabajo, y que encuentre en este sector una oportunidad estable de desarrollar su proyecto vital con calidad de vida. En junio se ha mejorado un 5,71% esa cifra de personas que trabajan en establecimientos de alojamiento y restauración, siendo ya de 19.212 castellonenses. Una tendencia positiva de creación de empleo que se ha mantenido desde el pasado mes de enero, y que ya acumula un aumento del 5,33%”.

En cuanto a las cifras concretas de la actividad turística, cabe señalar que en el primer semestre de 2015 han visitado los hoteles de la provincia de Castellón un total de 454.145 viajeros, que han realizado 1.329.520 pernoctaciones en estos establecimientos. Es especialmente significativo el aumento acumulado de viajeros nacionales, del 9,45%, manteniéndose la tendencia positiva también en la cifra de viajeros extranjeros, ya que la variación interanual es del 0,25%.

Enriquecer la oferta complementaria, decisivo

Otra importante contribución de la Diputación a la mejora del comportamiento turístico es la apuesta del presidente Moliner por enriquecer la oferta complementaria de los pueblos a través de más de 200 eventos deportivos repartidos por todos los pueblos y en torno a 800 actividades culturales.

Martínez ha señalado que “desde la Diputación estamos impulsando desde hace años centenares de actividades culturales, gastronómicas y deportivas especialmente en los municipios del interior de la provincia que sirven de reclamo para intensificar y alargar cada vez más esas visitas”.

Un aumento continuado que ayuda a mejorar la rentabilidad

Si bien es cierto que la estrategia de la Diputación al frente del Patronato Provincial de Turismo es implementar la mejor promoción de la marca turística de la provincia en sus públicos objetivos más interesantes, también lo es mejorar el posicionamiento del destino para que revierta en una mayor rentabilidad a los empresarios y a los municipios. En ese sentido, el incremento de ocupación y de viajeros que se está registrando desde principios de año ayuda a seguir mejorando ese índice de rentabilidad.

“Uno de los datos más interesantes para el sector y que arroja este balance es la mejora paulatina de la rentabilidad, algo que se ha conseguido al aumentar las habitaciones ocupadas durante este tiempo. Un dato que confirma que es rentable romper la estacionalidad de nuestro sector para las empresas, para los pueblos y sobre todo para la generación de nuevas oportunidades laborales para los ciudadanos castellonenses”, ha concluido el vicepresidente.

1 comentario:

  1. A cada español de bien nos ha tocado un cuñado progre que ahora, además, se ha hecho podemita, porque no hay majadería que no abrace con entusiasmo siempre que provenga de la izquierda. Es posible que usted tenga la suerte de no tener un cuñado podemita: no se preocupe; a otro le han tocado dos (¡o tres!). La estadística no falla.



    Si la Navidad es la época más peligrosa del año por los gañotazos del cuñado progre, el verano no le anda a la zaga. El cuñado diseña minuciosamente sus vacaciones para gozar de la hospitalidad forzosa de toda la familia. Juega con ventaja, claro, porque los sitios que él frecuenta no son precisamente el lujo asiático que todos ansiaríamos disfrutar. Cuando corre de su bolsillo, el cuñado progre se aloja en albergues alternativos donde las colas para utilizar el único baño que funciona comienzan a las seis de la mañana. El ambiente es enriquecedor y el personal muy progresista, pero lo más importante es que ahí no hay el menor riesgo de que una avalancha de familiares se te presente con el objetivo de pasar contigo el fin de semana.



    Estas cosas son las que te cuenta para dejar claro que él es un tipo mucho más moderno y comprometido que tú, mientras deja las maletas en la entrada del coqueto apartamento en el que pretendías pasar quince días tranquilos con tu mujer y los niños. Antes de terminar de explicarte lo enriquecedoras que eran las veladas culturales en el albergue de okupas ya se ha instalado. Hemos de reconocerlo: a la hora del gañotazo, el tío es un profesional.



    El cuñado ama los ambientes alternativos, pero prefiere pasar el verano contigo en tu bungaló de clase media. Como dice pablemos cuando se pone pedante (o sea, siempre), lo suyo es "cabalgar contradicciones". Y comer marisco a tu costa cada vez que haya ocasión, así se esquilmen los fondos marinos de crustáceos, moluscos y equinodermos y perezca la vida en los mares, que una cosa es acusar de fascista al que le gusten los toros y otra muy distinta privarse de tirarle a la cigala fresca como un liberado de la UGT.



    El mes de agosto es la etapa más crítica de las vacaciones porque durante esas semanas el cuñado progre puede atacar en cualquier momento. Él solito se encarga de convertir el verano en una época penitencial. Pero no debemos angustiarnos: su compañía forzosa durante las vacaciones es una especie de maldición bíblica de la jamás nos podremos zafar. Cuanto antes lo aceptemos más tranquilos pasaremos las vacaciones y mejor nos sabrán los gintonics de la madrugada, junto al mar, a la luz de las estrellas.

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