miércoles, 15 de octubre de 2014

Un sondeo interno otorga al PP el doble de escaños que al PSOE en la Comunidad Valenciana

Los populares recuperarían siete puntos respecto a las europeas, y el tripartito necesitaría a Podemos


El PPCV maneja una encuesta interna cuya conclusión principal es que el tripartito no podría gobernar sin el apoyo de la opción populista de Podemos, que además se queda muy cerca del PSPV en respaldo electoral y escaños. El sondeo, según los datos a los que tuvo acceso ayer este periódico, otorga al PPCV un apoyo en intención de voto del 36,4%, todavía lejos del que obtuvo en las últimas elecciones autonómicas, pero siete puntos por encima de las europeas (en las que se quedó con un 29% de los votos). De esta forma, un PP al alza se situaría con diferencia como la fuerza más votada en 2015, dieciséis puntos por encima del PSPV.




Según la encuesta, cuyo trabajo de campo terminó hace escasos días, los populares valencianos lograrían entre 41 y 43 escaños, casi el doble que los socialistas, a los que la encuesta otorga una intención de voto del 20%, y entre 22 y 23 escaños. Muy cerca del partido de Ximo Puig se quedaría, según el trabajo demoscópico, la que emerge como la tercera opción política de la Comunidad, Podemos –que en las europeas quedó en quinta posición, aunque por delante de Compromís–.

La formación que lidera Pablo Iglesias lograría un respaldo del 16,3% del electorado, lo que se traduciría en una horquilla de 18 a 20 diputados. Es decir, casi tantos como los socialistas. Un resultado que, por tanto, complicaría al partido que lidera Puig ponerse al frente de un pacto a múltiples bandas con el resto de la izquierda para relegar al PPCV. Y que dibuja un escenario que impide al tripartito gobernar a solas, tal como adelantó este periódico el pasado 26 de septiembre, en base a los resultados de los sondeos que manejan los distintos partidos con representación parlamentaria.

Por detrás de Podemos quedarían Compromís, con un 10,8% de apoyo y 10 escaños, y EU, con un 6,2% de intención de voto y entre 5 y 6 diputados. El sondeo, eso sí, deja fuera del Hemiciclo a UPyD, que no obstante aún tiene opciones de superar el listón del 5% de los votos. De ser así se abriría la puerta a un hipotético pacto de gobierno con el PPCV.

11 comentarios:

  1. El PPCV, desde la llegada del revulsivo Bonig como coordinadora general, ha vuelto a recobrar la iniciativa y, sobre todo, el contenido político e ideológico. Se transmite unidad en el partido sabiendo que viene en pocos meses una cita electoral distinta a las de años anteriores y la movilización del personal propio desencantado es la máxima prioridad para recuperar el voto de centro derecha que se quedó en casa en las europeas.

    El discurso debe ser claro, conciso y contundente; Recuperación económica, regeneración política, defensa de la reforma electoral, blindaje de las señas de identidad y exigencia de una financiación justa sí o sí. Mensaje hay y ahora hay que saberlo transmitir. La maquinaria debe ser vertical y funcionar conjunta, la fortaleza municipal de los populares es su principal activo a tener en cuenta.

    Mientras, en la otra parte, la izquierda, en el «zurdopartito» del que hablaba Fabra, todo son incógnitas. El PSPV de cara a la galería tiene que mostrar una imagen más centrada que la de sus socios radicales, y a nivel interno la procesión va por dentro. Los peores resultados históricos de los socialistas valencianos es más que una previsión y las familias internas ya están con el cuchillo para ver su futuro.

    Los ciudadanos valencianos tienen que ver entre las diferentes opciones políticas cuáles cuentan con un proyecto para la Comunitat y cuales sólo buscan la confrontación y la división de debates ya superados por los valencianos.

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  2. El Lenin español ante su orgía de memeces:

    No sé quién le ha pagado el viaje a Juan Carlos Monedero a Argentina pero terminaré sabiéndolo. Porque estos chavales de la Uni siempre suelen viajar por cuenta ajena aunque en su caso, como profesor titular, le pagamos alrededor de 3.000 euros mensuales. ¡No sé si dedica mucho tiempo a estos contribuyentes! Eso sin contar que obliga “manu militari” a sus alumnos a comprar sus libros en un ejercicio bolivariano digno de créditos.

    Pues bien, la inexportable inquilina de la Casa Rosada bonaerense -¡a ver si explica alguna vez lo de los yacimientos de la Patagonia (provincia de Santa Cruz) y Repsol, por ejemplo- no ha podido tener mejor invitado a su país que Monedero justo en un momento en el que Argentina aparece de nuevo ante el mundo como un asentamiento impropio de prestarle nada porque no lo devuelve. ¿Causa/efecto? ¿Efecto/causa? Lo ignoro pero algo debe de haber.

    El gran tratadista político del mundo inabarcable ha dado con la piedra filosofal, precisamente en la tierra de Sanmartín, para acabar con la pobreza y la miseria en España. Primero salirse del euro y crear una moneda propia entre los países del sur de Europa…De esta manera las grandes potencias del norte no tendrá que avalarnos. ¡Genial! ¡Qué inteligencia tan preclara! Emilio Butragueño se equivocó cuando dijo aquello de que Florentino era un “ser superior“. Se estaba equivocando; sin duda, el ser superior es Monedero, el “mayor sectario que jamás he conocido”, en expresión del embajador Inocencio Arias, después de debatir con él.

    Luego ha dicho que España necesita una pasada por el “leninismo amable”. ¿Quiere decir una checa de Porlier, por ejemplo, remozada? ¿O ha querido decir construir algún otro Muro, que también conoce?.

    Hay que reconocer que cuando hacen análisis de la realidad hasta pueden ser notables. Pero cuando de lo que se trata es de ofrecer soluciones es algo de risa, si es que en Venezuela o Cuba no mataran simplemente por opinar.

    Pero ante tanta sandez -salirse del euro, no pagar la deuda, leninismo amable, 1.600 euros de salario mínimo, etc…- la verdad, no sé porque hay gente que se preocupa tanto por esta colección de ocurrencias. Siempre he tenido para mí que son como un soufflé y, oiga, hoy por hoy, y que se sepa, sin brigadas armadas.
    Con ellas ya sería otro cantar. ¡Lo reconozco!

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  3. En Caracas ya escasea hasta el pan:

    En la panadería «Menita», de la caraqueña urbanización de Los Palos Grandes, decidieron racionar la venta de pan a una unidad por persona. Pero en «Aída», a una manzana de distancia, ya han colgado el cartel de «no hay pan». Para no mostrar una imagen de desabastecimiento —el Gobierno ha prohibido hacer fotos que lo demuestren—, las panaderías llenan los estantes con pasteles y tortas que están fuera de la regulación para disimular una escasez que dura ya tres años.

    Los venezolanos sienten pánico cuando en el mercado falta la harina de maíz para hacer las tradicionales arepas (tortillas) y la de trigo para el pan y los espaguetis, el plato principal del sector popular. Estos dos productos forman parte de la cesta de alimentos básicos, en la que hay que incluir leche, aceite, margarina, mayonesa, pollo, carne, papel higiénico y pañales desechables para los niños. Las madres deben presentar la partida de nacimiento del bebé y su carné de identidad para poder comprar un paquete por niño. En breve el control será digital, con una máquina «captahuellas» inspirada en la cartilla de racionamiento cubana.

    Las colas y el peregrinar por los supermercados forman ya parte de la dura vida diaria de los venezolanos. Como en Cuba. La escasez de alimentos del 28% el pasado febrero y de un 35% en agosto, según cifras extraoficiales, se acentúa en el interior del país. Allí hay testimonios de peleas por un bote de leche o un kilo de harina. Los alimentos han registrado una inflación del 210% en los últimos 24 meses, según cifras extraoficiales. El Banco Central de Venezuela acaba de rebajar su anunciado IPC interanual del 63,4% al 60%.

    ¿Esto es lo que queremos los valencianos votando a Podemos?. Todavía estamos a tiempo de hacérnoslo mirar; si llegamos a dejar que esta "gente" nos gobierne, lo que nos ocurra será culpa nuestra y sólo nuestra.

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  4. La irrupción de la ultra izquierda populista.

    ¿Se imaginan qué pasaría si quien hubiese irrumpido con fuerza en el panorama electoral el pasado 25 de mayo fuese una formación ultraderechista? Ahora estaríamos escuchando voces "progresistas" para que, "por higiene democrática", nadie pactase con ella. Sería una fuerza política condenada a la marginación, tal como le ocurre en Francia al Frente Nacional de Marine Le Pen.

    Pues bien, en la otra ribera del río, sin embargo, no hay tales remilgos. ¿Alguien ha escuchado alguna voz en el PSOE que alerte de los peligros para el sistema democrático de pactar con la ultra izquierda populista de Podemos? Ni se escuchará.

    Más aún: si el PSOE necesita los votos de Pablo Iglesias para alcanzar cualquier ayuntamiento o comunidad autónoma el próximo año, no se dude: con la nariz tapada o sin mayores escrúpulos, pactará con ellos.

    En realidad -merece la pena recordarlo-, eso buscó siempre el zapaterismo: propiciar un "Frente Popular" de toda la izquierda que taponase el acceso al poder del PP por muchos años. El pacto del Tinell de Cataluña, pero trasladado a toda España.

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  5. ¿Pero qué nos creemos, que este flaco de coleta con más tics que un analfabeto político va a arreglar España?

    Hay que dar la bienvenida a Pablo Iglesias a la casta, parece que le va cogiendo el gustillo al cargo y ya falta poco para que se corte la coleta, vista de traje y corbata y espere a que su chofer le abra la puerta del flamante A8 oficial. Ya se atisba el ordeno y mando.
    Tanto es así, que las manifestaciones radicales y la violencia casi han desaparecido.

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  6. No corren tiempos para dormir la siesta en la política valenciana.

    Más allá de la sabia advertencia de los expertos del hospital de La Ribera que aconsejan no dormir más de media hora tras la comida, el calendario avanza inexorablemente hacia las elecciones autonómicas y municipales del último domingo de mayo de 2015.

    Las elecciones europeas dieron un serio aviso. La izquierda puede articular una alianza que arrebate al PP el gobierno autonómico, las Diputaciones (salvo el caso de Castellón) y los principales ayuntamientos.

    Los populares jugarán dos bazas.
    La primera debe ser la de la recuperación económica. Si el paro sigue bajando y los ciudadanos aprecian la mejoría que ya anticipan los indicadores macroeconómicos, todavía quedará partido.

    La otra baza pasa por resaltar las contradicciones internas de un hipotético tripartito, peleado de antemano en materias como las señas de identidad, la política fiscal o el medio ambiente.

    Por contra, el PP valenciano sigue sin encontrar el anhelado cariño del Gobierno central. Mil millones de euros es la diferencia abismal que les separa. Una cifra con la que la Generalitat podría cumplir sus compromisos de pago sin necesidad de realizar más ajustes, insostenibles ya en vísperas de una elecciones ante la que ya ha empezado la desbandada de cargos, que podría continuar este otoño en función de la agenda judicial que espera a destacados dirigentes populares.

    El Ejecutivo de Mariano Rajoy es consciente del «problema valenciano» que revelan las balanzas fiscales: una autonomía empobrecida que continúa aportando al Estado como si todavía fuera de las ricas.

    A Fabra le queda poco margen de maniobra, y ninguneos como el del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, contribuyen a un desgaste ante el que la oposición se frota las manos.

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  7. Es un hecho que en el PP existe un debate interno sobre cómo responder a los ataques de Pablo Iglesias y de otros dirigentes de este experimento pseudofascista de corte bolivariano.

    Hay quienes creen que debe despreciarse a Podemos y quienes, por el contrario, opinan que hay que enfrentarse a ellos en todos los terrenos. Ni una cosa, ni la otra. No es correcto despreciarlos porque es un hecho evidente que su discurso ha calado en un sector importante de la sociedad y que, al menos por ahora, amenaza con crecer aunque sea a costa del voto de la izquierda, y prueba de que están ahí con intención de quedarse es que han conseguido engañar como a chinos a toda una serie de profesionales de la comunicación que se sienten infantilmente atraídos por el romanticismo del lenguaje revolucionario y totalitario de Pablo Iglesias y sus muchachos.

    No es correcto despreciarlos porque es un hecho evidente que su discurso ha calado en un sector importante de la sociedad y que, al menos por ahora, amenaza con crecer.

    Lo primero que debe entenderse es que esa popularidad de su lenguaje se debe precisamente a lo extraordinariamente simple del mismo, construido sobre la base de argumentos muy fáciles y de enorme repercusión popular adaptados a las circunstancias actuales. Es evidente que Pablo Iglesias y los suyos son unos maestros en la manipulación del lenguaje y en la utilización de los medios, sobre todo privados –a los que luego critican- para expandirlo. En cualquier debate con él, Pablo Iglesias repite hasta la saciedad los mismos argumentos y las mismas consignas, lo que hace imposible una razonada contraposición de ideas.

    Su victoria se fundamenta en la extenuación del contrario que, acostumbrado a un debate en el que incluso es posible encontrar puntos de acuerdo, no logra colocar ninguno de sus argumentos porque carecen de la firmeza o la contundencia con la que Iglesias expresa los suyos hasta convencer al público que solo él tiene la razón.

    Existe una segunda razón por la que el debate con él está perdido de antemano para un político democrático: Iglesias no tiene ninguna responsabilidad ni la ha tenido nunca, realmente es un Don Nadie que ha llegado donde ha llegado gracias al concurso de una serie de factores externos que, eso sí, él ha sabido manejar astutamente, pero precisamente por eso puede decir lo que le dé la gana aunque él mismo sepa que si estuviera en el poder no podría hacer lo mismo.

    Por el contrario, un político que además haya ejercido tareas de Gobierno se debe a la responsabilidad y eso condiciona muchas veces su libertad para hablar. Por lo tanto, si se es un político de los que además están en eso que se llama la primera línea, no rebajarse nunca a debatir con Iglesias ni con ninguno de su secuaces.

    Con Iglesias y su gente no valen grandilocuencias, ni intentar explicar las cosas, ni buscar espacios de encuentro… No, con ellos solo vale la oposición frontal. Por lo tanto, el Partido Popular no debería depreciar a Podemos y, al contrario, preparar un equipo de gente dispuesta a debatir con ellos, y diseñar un argumentarlo de ideas sobre la base de sus mismos esquemas ataque-respuesta con argumentos muy claros, concisos y extremadamente populistas.

    Con Iglesias y su gente no valen grandilocuencias, ni intentar explicar las cosas, ni buscar espacios de encuentro… No, con ellos solo vale la oposición frontal y llevarlos al mismo terreno de guerra sucia al que ellos quieren llevar a sus contrincantes.

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  8. Iglesias no tiene ninguna responsabilidad ni la ha tenido nunca, realmente es un Don Nadie que ha llegado donde ha llegado gracias al concurso de una serie de factores externos. En cualquier caso, el PP debe ser consciente de que el electorado de Podemos no es el suyo, o no del todo… Es decir, existe el riesgo de que un determinado sector del voto de centro-derecha se sienta atraído por alguna parte del discurso demagógico y populista de Podemos… A ese votante y al que no vota al partido de Pablo Iglesias pero se queda en casa, si puede llegarle la creación de un cierto estado de temor ante la llegada al poder de un partido de corte fascista-populista; el Partido Popular debe ser machacón de las consecuencias que tendría para España un Gobierno de Podemos y el recuerdo constante de lo que ocurre en países donde gobiernan los amigos de Pablo Iglesias y los suyos: corrupción institucionalizada, libertad amordazada, presos políticos, asesinatos, violencia, ausencia de democracia…

    Y aún así seguirá habiendo gente que, de buena fe, se crea su discurso, pero al menos que no sea por incomparecencia del contrario.

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  9. Los deslizes de los políticos en Twitter: polémicas en 140 caracteres:

    Toni Cantó, diputado por UPyD, ha «incendiado» Twitter con sus declaraciones más de una vez. En una ocasión llegó a manifestar que «La mayor parte de las denuncias por violencia de género son falsas. Y los fiscales no las persiguen».
    No es la única polémica en la que se ha visto envuelto el valenciano. En verano del año pasado, Cantó publicó un «tuit» en el que ridiculizaba la pronunciación del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

    Además, el político de UPyD también provocó una gran agitación cuando tuiteó el fallecimiento del creador del LSD cinco años después de que se produjera el hecho.

    Durante el partido de fútbol entre España y Francia de la Eurocopa de 2012, Elena Valenciano, candidata del PSOE a las pasadas elecciones europeas, tuvo la brillante idea de descalificar en Twitter el físico de uno de los jugadores franceses: «¿Habéis visto a alguien más feo que Ribéry?», preguntó.
    Ante la avalancha de reacciones que provocó esta declaración, Valenciano reaccionó en un primer momento pidiento «un poquito de humor» a sus seguidores.

    En 2012, la cuenta de Twitter del Partido Socialista lanzó una crítica directa a los dos candidatos que aspiraban por aquel entonces al puesto de secretario general del partido; Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba. El «tuit» consideraba que «con una candidata podemos ir a peor. Y con el otro no vamos a ninguna parte. ¿Qué ha pasado con la cantera?».

    La que fuera ministra de Vivienda con Zapatero, María Antonia Trujillo, también es una experta en crear polémica en Twitter. En una ocasión criticó a los desahuciados afirmando que «El que tenga deudas, que las pague. Que no se hubiera endeudado», mientras que meses más tarde se refirió a la utilidad del catalán.
    «¿Para qué asuntos importantes sirve saber catalán?» se planteó la exministra en la red social. A pesar de las críticas que recibió por varios usuarios, al día siguiente Trujillo se reafirmó en su postura con un «tuit» en el que afirmaba: «Ayer pregunté por las cosas importantes para las que sirve saber catalán. Excepto dos o tres, nadie ha respondido. Eso sí, han demostrado que sirve para insultar».

    Un tuit publicado por lasJuventudes Socialistas de Zamoraen 2013 en el que se criticaba, curiosamente, la aprobación de la nueva ley educativa, la LOMCE, provocó una oleada de críticas en Twitter debido a la cantidad de faltas de ortografía que poseía.
    En concreto, el tuit literalmente afirmaba: «Por desgracia @jiwert va ha hacer oidos sordos a la comunidad educativa "aprovando" una ley inviable y "retrocesora".

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  10. La coordinadora general del Partido Popular de la Comunitat Valenciana (PPCV), Isabel Bonig, ha asegurado que el listado de infraestructuras que reclama el secretario general del PSPV, Ximo Puig, "es una mala copia de un documento de inversiones que el Consell ya está trabajando con el Ministerio de Fomento".

    Bonig, en un comunicado, ha exigido al "líder en minoría" que "deje de engañar a los valencianos y, en todo caso, al menos, pida perdón y explique de una vez por todas por qué no alzó la voz contra Zapatero cuando frenó, paralizó o liquidó inversiones estratégicas para la Comunitat Valenciana, y que son precisamente las que ahora la Generalitat está trabajando con un gobierno del Partido Popular en España".

    La dirigente 'popular' ha atribuido las declaraciones de Puig a "la confusión en la que está instalado y a los problemas que él mismo se genera cuando tiene una idea y su propio partido tiene que salir a desmentirle como hemos visto recientemente". "En este caso, ha decidido directamente copiar el trabajo de otros, sin reparar en que reclama lo mismo que sus jefes nos negaron durante años, y que además es algo que ya está poniendo en marcha un Gobierno del PP", ha manifestado.

    "¿Por qué calló el señor Puig cuando Zapatero paralizó las obras del tercer carril de la V-21 de entrada a Valencia o la mejora de la A-3? ¿Dónde estaba cuando ignoró una actuación como la variante de Benisa, muy importante para un sector clave como el turismo que tiene en la Costa Blanca uno de sus principales destinos de referencia? ¿Dónde estaba cuando su ministro José Blanco decidió anular las licitaciones del AVE Valencia-Castellón y se olvidó de un segmento del AVE a Alicante?", se ha preguntado Bonig.

    Del mismo modo, ha subrayado que "obras fundamentales como el desdoblamiento de la variante de Benidorm o el tercer carril de la V-21 entre Puçol y el Carraixet han sido acabadas por el Ministerio que dirige Ana Pastor, y el Tercer Carril Ferroviario ya está en marcha como resultado de un proyecto que se gestó en la Conselleria de Infraestructuras y del que se han licitado ya 14 obras, y adjudicado 13 de ellas".

    Por todo ello, ha calificado como "una broma de mal gusto" que ahora Puig pida a los parlamentarios valencianos que reclamen "lo que él, sus dirigentes y su grupo parlamentario en el Congreso negaron sistemáticamente a los ciudadanos de la Comunitat Valenciana".

    Así, ha recordado que "gracias a la actitud cobarde y servil de Puig, la Comunidad Valenciana tuvo un déficit de inversiones de 400 millones de euros al año durante los gobiernos socialistas de Zapatero".

    Bonig ha señalado que precisamente en un contexto de dificultades económicas como el actual, el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha puesto en marcha las obras del Corredor Mediterráneo "con unas inversiones muy importantes y de las cuales el 20% corresponden en la Comunitat Valenciana".

    ¡Chimo, Chimo, que se te ve mucho el peluquín!

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  11. Rosa Díez los prefiere sumisos.

    Dice el proverbio árabe que “la primera vez que me engañes, será culpa tuya; la segunda vez, la culpa será mía”. Con este breve artículo sobre mi militancia de seis años en UPyD, ahora que no pertenezco a ningún partido y desde la independencia que me otorga esa condición, quiero informar a la opinión pública sobre la pesadilla que hemos sufrido muchos concejales y cargos tras haber recorrido los nueve círculos del infierno magenta. Si soportamos el vía crucis fue bajo la vana esperanza de luchar por cambiar las cosas desde dentro, algo que es imposible. En UPyD, ni unión, ni progreso, ni democracia.

    Sirva como ejemplo la alta tasa de mortalidad (en términos políticos) que padecemos los ediles de esa formación.
    Los últimos recuentos, incluyéndome a mí, nos informan de la baja de 17 concejales de los 152 que resultamos elegidos en 94 municipios. El 11,2% de los regidores electos hemos abandonado el partido y ha desaparecido la representación en 11 de esas localidades. Si ese dato se hubiera producido en el PP o el PSOE, se hablaría de sangría imparable, ruptura, crisis… y las críticas arreciarían por todas partes. Pero en UPyD es como si nada pasara.

    Tenemos la obligación de contar a los ciudadanos que UPyD no es lo que parece, y que internamente hace justo lo contrario a lo que predica en materia democrática, siendo todo puro teatro y maquinación dispuesta por el aparato.
    Si uno no se conforma con pegar carteles, repartir panfletos y palmear en los mítines, a UPyD le sobran la mayoría de sus militantes, de sus concejales y de sus bases en general, a los que utilizan como mano de obra gratuita. Cuando alguno de éstos rechista, tiran de expediente que da gusto, habitualmente instruido por la diputada de la Asamblea de Madrid Elvira García Piñeiro, según la prensa, famosa por su afición a los novillos.

    En UPyD se han expedido alrededor de 20.000 carnés de afiliación; sin embargo y sorprendentemente, el número real de afiliados nunca supera los 6.000. El diputado Carlos Martínez Gorriarán tuvo la osadía de manifestar en público, en un acto para concejales celebrado en junio de 2013 en Madrid en el que yo estaba presente, que ello se debía a que “se trata de afiliados de poca calidad”. Si usted, lector, es uno de ésos, dese por aludido. Sabrá entender lo que le estoy contando.

    Es la hora de quitarles la careta, para que todo el mundo sepa que la cúpula de ese partido no es una marea magenta, sino una organización con tintes sectarios que no tiene más objetivo que servir a la triste figura de La Pantera Rosa, y que sobran los motivos para negarle el voto a Rosa Díez por haber creado el mayor fraude político de la historia reciente de este país.

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