miércoles, 9 de septiembre de 2015

Marzà deja en el aire la continuidad de la línea educativa en castellano

  • Cambiará el modelo lingüístico con 'criterios pedagógicos' y 'partiendo de la lengua propia'
  • Los proyectos de la etapa del Partido Popular seguirán mientras no cambie el plan

La tradicional rueda de prensa de inicio de curso en la Conselleria de Educación cambió ayer de escenario y de formato. De la habitual sala de prensa donde se recibe a los periodistas se pasó al salón de actos donde se organizan las grandes reuniones con todos los agentes educativos. De la comparecencia de los políticos ante los medios exclusivamente se pasó a una presentación ante periodistas, sindicatos docentes, asociaciones de padres, funcionarios de la casa... Y en este acto que buscaba claramente marcar distancias (no sólo en cuestión de imagen) con la anterior etapa del PP en la Conselleria se permitió a cualquiera preguntar al conseller.

El presidente de Escola Valenciana, Vicent Moreno, aprovechó para plantear al titular de Educación, Vicent Marzá, por la continuidad de proyectos puestos en marcha por el PP en materia de plurilingüismo, como fueron los llamados colegios superplurilingües (centros públicos con línea en inglés). «No queremos acabar con todos esos proyectos hasta que no tengamos un modelo de enseñanza óptimo», dijo Marzà.

El conseller confirmaba así su intención de cambiar el modelo lingüístico a partir de «criterios pedagógicos, para que los alumnos dominen las dos lenguas oficiales partiendo de la propia», además de la extranjera. En la actualidad, conviven en los centros los programas plurilingües en valenciano y en castellano (ambos con alguna asignatura en inglés), con lo que en teoría las familias pueden elegir. En la práctica, en todo caso, Escola ha denunciado que no todas las familias que querrían matricular a sus hijos en valenciano tienen oferta para hacerlo, de la misma manera que ayer desde la Permanente de Directores de Secundaria se lamentó la falta de continuidad en muchos casos de los programas de valenciano en ESO y Bachillerato.


Sin embargo, preguntado sobre si en el nuevo modelo lingüístico tendrá cabida la línea en castellano, Marzà se limitó a señalar que es una cuestión que habrá que abordar con toda la comunidad educativa, si bien insistió en que la propuesta se hará en base a «criterios académicos». Y a la pregunta de si el nuevo modelo sería único para todas las escuelas -sin posibilidad de elección como ahora-, la respuesta del conseller fue en el mismo sentido, es decir, sin cerrar la puerta a ninguna posibilidad.


Desde Escola Valenciana -entidad a la que estaba vinculado Marzà antes de ser conseller-, se reivindicó precisamente ayer en un comunicado que «el programa de enseñanza óptimo para dominar de forma equilibrada el valenciano y el castellano, y la introducción a una lengua extranjera, es el programa de enseñanza en valenciano, dado que el alumnado escolarizado en inmersión suele presentar mayor ductilidad y actitudes más favorables al aprendizaje de lenguas». Con lo que fue crítico Marzà fue con el anterior gobierno, al que «no le preocupaba la demanda de las familias en valenciano, a pesar de que hablaba de libertad».

El Mundo

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