Muchos son los proyectos y actividades que
realizamos a nivel municipal, culturales, musicales, deportivos, ocio,
preventivos, y un largo etc… y en un número importante contamos con la
colaboración de la Diputación Provincial.
La
Diputación, sensible a las necesidades de los municipios, va ampliando
sus líneas de colaboración y apoyo, en este caso, el pasado año, puso en marcha
un proyecto de mejora de caminos rurales, lo cual nos permitió mejorar, entre
otros, la Rocha Somat, Garrofa, El Gordo, etc,. de nuestro término municipal.
Para este año 2014, vistos los magníficos resultados
el anterior ejercicio, se volvió a convocar el Proyecto de Mejora de Caminos
Rurales, y nuestro Ayuntamiento, solicitó la realización de actuaciones en
diversos caminos, y ya en este mes de Abril, se han llevado a cabo las mismas
por la maquinaria del Parque Provincial, como: retroexcavadora, tractor con
cajón nivelador y desbrozadora, centrándose los trabajos en la zona del camino
del Barranco Ascon, Masía La Mocha, Camino Viejo de Ferrer, Navajo el
Dominguillo, así como en distintos tramos de cunetas en la zona de Cabrera,
Cabezo, acceso a Villatorcas, antigua Nacional 234, etc…
Estas actuaciones junto con las que realizamos desde
el propio Ayuntamiento, nos permiten disponer de una amplia red de caminos
rurales en condiciones óptimas, sin olvidar que, la mayoría de ellos, son de
firme de tierra, con el consiguiente deterioro que se produce en época de
lluvias, aunque desgraciadamente no está ocurriendo ese fenómeno en la actualidad.
Para finalizar agradecer el apoyo constante de la
Diputación, presidida por D. Javier
Moliner y todo su equipo, hacia los municipios, en este caso Segorbe y animarles a que sigan con este tipo de
proyectos que tan importante ayuda nos presta, y que junto con las actuaciones
municipales nos permiten mejorar de manera continua, en este caso, los caminos.
Vicente Hervás García
Concejal de Agricultura
Que se adelanten los telediarios:
ResponderEliminarLos españoles hemos consolidado un intenso hábito de nocturnidad, que contrasta con lo que ocurre en casi todos los demás países europeos. Para comprobar la diferencia, bastaría con intentar cenar en un restaurante de Francia pasadas las ocho de la tarde.
La realidad de un clima mucho más benigno que el de las naciones del centro y norte de Europa, la tradición de la tertulia, la costumbre de salir a tomar unas copas, la cena tardía... son factores que contribuyen a profundizar aún más ese hábito trasnochador.
A ello se han apuntado desde siempre las televisiones, que reservan para las horas tardías sus mejores espacios, configurando así un prime time ubicado entre las 10,30 y las 12 de la noche, auténticamente prohibitivo si se piensa en nuestros vecinos.
Esa programación de noche comienza con los informativos, los telediarios, que inauguran el tiempo nocturno.
La ministra de Sanidad acaba de lanzar la propuesta de que las cadenas adelanten la emisión de los noticieros, para que las películas y las series acaben una hora antes de lo que ahora ocurre, o sea, en torno a las 11 de la noche. Uno de los argumentos es favorecer la conciliación familiar.
Cree Ana Mato que ese adelanto ayudaría a corregir los horarios. Y tal vez pudiera ser así. Lo que pasa es que las televisiones han respondido, con bastante sentido común, devolviéndole la pelota: que los espectadores cambien sus hábitos, y entonces ellas adelantarán la programación estelar.
Seguramente la propuesta acabará en nada. Pero al menos abre de nuevo el debate sobre la conveniencia o no de continuar con el 'horario español'. Bastante irracional aparentemente, pero que, por lo visto, a nosotros tampoco nos disgusta demasiado.
Es muchísimo más preferible empezar a trabajar una hora antes y por la tarde terminar también antes; le podriamos dedicar más tiempo a nuestra familia, nuestro ocio y a muchas otras cosas. Si lo probamos seguro que nos gustará.
Desde la perplejidad pero con amor:
ResponderEliminarA veces los hijos olvidan o valoran poco la ilusión con la que unos padres vivirían determinadas situaciones personales. No diré que sea falta de respeto, pero a veces se aproxima bastante. Miramiento, consideración, deferencia. Por amor, por cariño, por edad, por ser padres… Nada de esto es una cuestión trasnochada. Los hijos, que tanta educación en el trato personal reclaman de sus jefes en el trabajo, y con razón, a veces olvidan que deben el mismo trato considerado a sus jefes. A veces olvidan que, siendo regidores de sus propias vidas en el trabajo y también en su familia, también deberían ser más considerados hacia sus padres. El “es mi vida” es muy importante, porque cada cual debe dirigir sus pasos hacia donde crea conveniente para su felicidad… y para las de los demás.
Que los hijos tengan en cuenta la opinión de los padres acerca de asuntos vitales no significa que los hijos terminen haciendo lo que quieran sus padres. Simplemente, que procuren que sus obras no causen dolor a los padres. Más aún, que esas obras alegren a sus progenitores. Hay situaciones inevitables en la vida, pero otras lo son, o las podemos trasladar en el tiempo, de modo que puedan ocurrir de otro modo. Eso lo podemos hacer todos en esos momentos no inevitables. Padres e hijos. Si lo que hoy puede agradar, mañana no, ¿por qué no hacerlo hoy? Y viceversa: si algo puede entristecer hoy y sin embargo mañana o dentro de cuatro ser causa de una gran alegría, ¿por qué no retrasarlo? Aun a coste de algún inconveniente personal. No hablo de hechos triviales. No hablo de ir al cine o de ponerse unos pantalones. No hablo de comprar o alquilar una vivienda. Estoy hablando de hitos en la vida de toda persona. Estoy hablando incluso de cómo anunciar ciertas situaciones. Conozco el caso de un hijo que anunció a sus padres que en breve serían abuelos. Pero lo hizo a través de un mensaje con el teléfono móvil. Unas palabras acompañadas de dibujitos. Se lo pudo decir personalmente ese mismo día, pero pensó que no pasaba nada, que sería más divertido... Esto me lo contó el padre, el futuro abuelo. Y se preguntaba, me preguntaba, si no merecían como padres una conversación cara a cara, cálida, alegre, anunciando la buena nueva. “No soy un colega, soy su padre”, me dijo entristecido.
Antes de actuar, valoremos ventajas e inconvenientes, beneficios y perjuicios. Hacia uno mismo y para los que nos rodean, sobre todo, los más próximos. Padres e hijos. Por muy padre que uno sea y por mucho que a uno le apetezca algo en su vida, que también es suya, lo propio es valorar la conveniencia de adelantar, posponer, rechazar, decir, callar, hacer u omitir ese algo, por si pudiera ser poco considerado hacia sus hijos. Es decir, pensar en las consecuencias. En los demás.
Los hijos también deberían hacer ese ejercicio. A veces nos hacen vivir situaciones insospechadas. Está bien, porque aprendemos, pero caramba… La vida nos presenta ocasiones únicas, irrepetibles. Otras, no tanto. Como dice la canción, la vida son cuatro días y yo ya voy por el tercero… Y, salvo excepciones dramáticas y dolorosas hasta el infinito, ya vamos al menos por el tercero los padres que nos vemos hablando de estos temas… Vamos, que nos van quedando menos oportunidades para que nuestros hijos adultos nos regalen buenos momentos. He escrito estas líneas pensando en mis amigos padres y mis amigos hijos. También pensando en mí mismo como hijo. Y en mis propios hijos. Esta carta puede parecer un reproche triste. Lo es. Desde la perplejidad, aunque con mucho amor.
Zapatero recibe el premio 'Pluma': "El matrimonio homosexual sí que es Marca España"
ResponderEliminarEl expresidente del Gobierno ha reconocido, al recibir el premio "Pluma", sentirse orgulloso de haber cambiado "la vida de miles de personas" y haber convertido España en un país "más decente" que respeta los derechos de todos sus ciudadanos con independencia de su identidad sexual.
El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero ha afirmado, al recibir el premio "Pluma" que concede la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (Felgtb), que el matrimonio homosexual, aprobado en su mandato, "sí que es Marca España" y fue ejemplo para otros países.
Ha admitido que tuvo que contenerse la emoción el día que subió a la tribuna del Congreso de los Diputados para defender la ley del matrimonio homosexual y, en tono de broma, ha dicho que esa jornada se le olvidó ondear la bandera multicolor en el Palacio de la Moncloa. "Sabía que era un momento histórico y que a partir de ese momento España iba a ser un país más decente, frente a los que siempre pensaron que esto era una indecencia".
"EL MAL NO ES LO QUE ENTRA EN LA BOCA DEL HOMBRE, SINO LO QUE SALE DE ELLA".