Pasó Papá Noel, los Reyes Magos dejaron sus regalos, nos comimos el roscón y empezó la cuesta de enero. Ufff... ¡menuda cuesta!
Sí que el viento sopla a favor pero hay que remar. Remar, remar y remar... todos en la misma dirección y, sobre todo, no caer ni la complacencia ni en los brotes verdes ni en las señales esperanzadoras. ¿Lo conseguiremos?. Seguro que si.
Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia.
Pasó Papá Noel, los Reyes Magos dejaron sus regalos, nos comimos el roscón y empezó la cuesta de enero. Ufff... ¡menuda cuesta!
ResponderEliminarSí que el viento sopla a favor pero hay que remar. Remar, remar y remar... todos en la misma dirección y, sobre todo, no caer ni la complacencia ni en los brotes verdes ni en las señales esperanzadoras. ¿Lo conseguiremos?. Seguro que si.
Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia.