lunes, 21 de mayo de 2012
¿Dónde Estamos?
Estamos en el lugar justo que merecemos. En la
penosa situación a la que inexorablemente conduce el comportamiento equivocado,
de agentes públicos y privados, en un entorno de desconfianza internacional.
Cuando una administración pide un préstamo lo que
hace es anticipar el disfrute de una obra, o un servicio, para la que carece de
recursos demorando el pago a la siguiente generación, o al posterior gobierno.
Y resulta que nosotros somos esa generación, no hay más, o ese gobierno, que
debe hacer frente a las deudas de los anteriores. No viene nadie más detrás, a
hacerse cargo de nuestros prestamos, porque ni bancos ni país tercero se fía de
seguir dejándonos sus fondos.